Salice y la esquizofrénica sangre
Tras cruzar el umbral sintió que un líquido corría por su oído derecho. Saludó al vigilante que en la caseta veía un juego de fútbol, del mundial de fútbol. Portugal ganaba, por eso los vecinos daban vítores y gritos desde sus apartamentos. Salice se llevó un dedo —el índice, fue el dedo índice— de la…